24 de marzo de 2013

Es posible motivar en el aula.

Todos sabemos lo complicado que es que los alumnos estén comprometidos y motivados en clase. 
Sabemos que es un reto que muchos docentes quieren llegar a conseguir... pero, ¿cómo? ¿se puede conseguir que los alumnos no se queden dormidos en clase?


¡¡¡Claro que se puede!!! 
Peeeeero (siempre hay un pero...) no podemos hacerlo si seguimos creyendo que solo se puede aprender si se hace de memoria y mecánicamente. 
Hay otras formas de enseñar, otras maneras de aprender, solo hay que ponerse manos a la obra, pensar estrategias de trabajo motivantes para utilizar en nuestras aulas.

¿Y COMO SE HACE ESO?

Utilizando un sistema de aprendizaje basado en proyectos. En un aula el grupo de alumnos no es un grupo homogeneo, cada uno tiene una manera de aprender, tiene diferentes antecedentes étnicos y culturales, distinas habilidades... Lo que no podemos hacer es tratar al grupo como si fuera uniforme, pues esto no ayudará a que consigan las metas propuestas.


El aprendizaje basado en proyectos ayudará a fortalecer las individualidades de los estudiantes y a explorar sus áreas de interés.

Esta forma de enseñar motiva a los jóvenes a aprender pues ellos pueden seleccionar sus temas de interés y importantes en sus vidas. Es una propuesta que se centra en el estudiante y que es dirigida por él mismo en la que se tratan problemas del mundo real.

¡Fomentemos la creatividad, motivemos a nuestros alumnos, es un reto difícil, pero no imposible!



El otro día encontré este video ilustrativo que explica perfectamente el aprendizaje en proyectos. Me parece un buen apoyo para entender esta forma de enseñanza-aprendizaje.







"Dígame y olvido, muéstreme y recuerdo. Involúcreme y comprendo" Proverbio Chino.

17 de marzo de 2013

Cry, cry, cry

Soy una llorona.
Sí, lo reconozco.Lloro por TODO. Incluso por las cosas más tontas.
Cuando hablo de esto además, siempre me viene a la cabeza los momentos de ver películas con mi hermano. Soy capaz de llorar con todas. Absolutamente todas las películas que vemos. 
Siempre me acordaré de aquel día que, viendo la película de Juno (esa chica de dieciseis años que se quedó embarazada por accidente de uno de sus mejores amigos) yo estaba llorando a moco tendido, qúe pena me daba, tan joven y embarazada. Cuando mi hermano de repente me miró y me gritó: 
"¡¡¡DIOS VEGA SI ES QUE LLORAS CON TODO!!!, lloras con las películas de amor, las de miedo, las de pena, las que acaban bien, las que acaban mal, y  hasta ¡¡¡CON LAS DE EMBARAZADAS!!!"

Pero es que no puedo evitarlo, me gusta llorar, me siento bien llorando un rato, es como quitarse un peso enorme de encima, de desahogarse profundamente. 


Pero una cosa que muy pocas veces he hecho ha sido llorar de alegría. En realidad, solo recuerdo haber llorado de alegría cinco veces. Pero me parece algo mágico. Esa sensación de estar llorando pero a la vez tener una sonrisa que no te cabe en la cara, que te duelen los mofletes de sonreir tanto, pero también los ojos de llorar como un loco, y escuece la cara de los lagrimones de cocodrilo que te caen por las mejillas. Es una mezcla de sensaciones fenomenal, y pocas cosas hacen que esto pase. Y ese momento en el que pasa te sientes una persona plena, una persona a la que no le falta nada, que tiene todo lo que necesita para ser feliz.

Lo más impresionante, es que de esas cinco cosas que recuerdo, dos han ocurrido esta semana. DOS, ni más ni menos. Ha sido una semana imposible de olvidar, ha sido  mi semana fantástica
Podría decir que ojalá hubiera más semanas así, pero en realidad no, si esto pasara contínuamente, cada semana, al final terminaríamos habituándonos a ello, habituándonos a esas sensaciones maravillosas y no dándonos cuenta de lo que realmente esto supone.

Para terminar os dejo con un par de videos que me vuelven loca cada vez que los veo. 
Hace unos años vi un vídeo de este duo de Cellos y hace unos días vi otra canción versionada por ellos. Y ésto sí que es arte. Jamás se me hubiera ocurrido que un simple cello, un instrumento que se piensa que puede solo usarse para tocar música clásica, pueda llegar a sonar como esto suena, y los chicos que lo tocan que hayan logrado tocar algo así... Me pone los pelos de punta. Espero que a vosotros también os gusten.







PD: Os tengo que contar al menos una de las cosas que me ha hecho llorar de alegría esta semana. Y es que... después de mucho esfuerzo y mucho tiempo intentándolo... 
¡¡YA SOY CONDUCTORA LEGALMENTE!!


Un saludo.
Hasta la próxima 

12 de marzo de 2013

Que nada te quite tu sonrisa

Hoy tuve una conversación de esas que pocas veces tienes, de esas que te hacen reflexionar, que te hacen pensar de verdad las cosas de la vida.
Una conversación profunda, de las que a veces hay que tener.

No tenía muy claro de que quería escribir la entrada de hoy, pero esto me ha abierto la mente. Y me ha dejado claro de qué tenía que hacerla.

Mientras mi amigo y yo hablábamos sobre lo importante que es que una persona sea positiva, que te haga ver el lado bueno de las cosas (no, la película no, el otro lado bueno de las cosas). Es necesario tener cerca personas que te hagan sentirte bien, que no esten sumergidas en la negatividad constantemente, que estén felices consigo mismas y que así hagan que se sientan los que les rodean. Pero hay poca gente así, o al menos es dificil encontrarla.

Hay pocas cosas en la vida lo suficientemente importantes para quitarte la sonrisa o la alegría me dijo. También que pensar en positivo cuesta lo mismo que pensar en negativo.Y tiene toda la razón. Tenemos que ser optimistas siempre que podamos, que no nos invadan los malos pensamientos.

Y gracias a esta "chapita" que me cortó, como el dice, he pensado muchisimo sobre el tema y he optado por ser positiva siempre.

Gracias a Borja Rodil por darme la idea para mi entrada de hoy y por tener una visión de la vida tan increible.